Tarea de los Empresarios Emprendedores en la Hora Presente:
Invertir, Innovar y Producir Más
Fue el Congreso de la República nuevamente el escenario en el que se dio cita un importante grupo de pequeños y micro empresarios. Auspiciado por CONACO y contando con el decidido apoyo de ese Poder del Estado, este nutrido grupo de empresarios emprendedores compartió un momento de reflexión sobre la hora presente y el rol que todos debemos cumplir para darle sostenibilidad al crecimiento y convertirlo en desarrollo.
El Director General de nuestra revista Marco Antonio Arrunátegui Cevallos, como miembro del directorio de CONACO, asumió la responsabilidad de pronunciar un discurso; el mismo que por la pertinencia de sus conceptos y la invitación que hizo a la reflexión hemos creído oportuno publicar.
Vamos a darle sostenibilidad al crecimiento. Ese es el reto de los empresarios. Pero, a la vez, convirtámoslo en desarrollo. Para ello, el Congreso debe abocarse con urgencia a someter al Estado a una profunda reforma. Si como país no nos comprometemos en estas dos tareas, esta será una nueva oportunidad perdida.
Cabe señalar que a esta cita concurrieron Yehude Simon Munaro, segundo vicepresidente del Parlamento; José Luis Cama Godoy, presidente del V Congreso Nacional de Empresarios; Julio Gagó y Santiago Castañeda, congresistas de la República.
Asimismo, Vicente Díaz Arce, representante y fundador del Emporio Comercial Gamarra; Oswaldo Morán presidente de Comype de CONACO; María Lita Ruiz, directora del Consorcio Educativo Santo Domingo; y el presidente de directorio de CONACO Moisés Mieses Valencia, entre otras dignas personalidades.
La reflexión es el arte que antecede a todo emprendimiento. Y dado que nunca como hoy el país estuvo en mejores condiciones económicas, se hace necesario reflexionar, aún más, respecto al rol que cada uno debe cumplir para que este crecimiento económico no sea una nueva oportunidad perdida, como ocurrió varias veces en el pasado.
Para ello, nada mejor que situarnos en el contexto de la economía. En 1933 el noruego Ragnar Frisch la dividió en macro y microeconomía.
La macroeconomía, es el paraguas que crea las condiciones para que crezca el total de bienes y servicios que produce la Nación, conocido como PBI. Crecimiento que permitirá que se incremente el total de ingresos, aumente el nivel de empleo y la cantidad de recursos productivos. Esa es su tarea. Crear condiciones para que se desarrollen los agentes productivos.
Tres conceptos
La microeconomía, es la que se encarga del comportamiento de los agentes individuales, en suma, de quiénes producen, de quiénes consumen y del mercado. Es decir, de los empresarios como ustedes. ¿Y cuál debe ser vuestra tarea en la hora presente? la resumo en tres conceptos: invertir, innovar y producir más.
Invertir porque el país es confiable. Porque para bien, se han guardado en el archivo, todas esas ideas estatistas, revolucionarias y antisistema, que nos espantaron en la primera vuelta electoral. Ahora el país discurre sin sobresaltos su destino económico.
Gracias a la seriedad y responsabilidad con qué se está manejando la economía desde hace dos décadas, el Perú ha sido el país que más inversiones extranjeras atrajo en el último quinquenio.
El segundo reto es Innovar para ser más competitivos. Para ello, el Estado debe tomar la iniciativa. Actualmente se destina solo el 0.16% del PBI en investigación y desarrollo. El promedio más bajo de América Latina. Pero la inversión privada, en ese aspecto es casi nula.
Debemos innovar
La macroeconomía abrió las puertas de nuestro país al mundo, a través de los Tratados de Libre Comercio. Ahora debemos competir con muchos paises. Si ese es el reto, tenemos que innovar, de lo contrario, el flujo de bienes y servicios tendrá solo una dirección, tal como nos lo dijo Francis Fukuyama.
Inversión e Innovación, harán que produzcamos más y mejor incrementando nuestro PBI. Fórmula que le dará sostenibilidad a nuestro crecimiento. Comparto el optimismo del presidente García, cuando dice en el título de su última obra: "Contra el temor económico, creer en el Perú". Vamos a creer, porque el Perú somos todos.
Empresario emprendedor
El célebre economista austro–estadounidense, Josef Alois Schumpeter, subrayó el papel de la innovación, porque mediante este esfuerzo, se "determina el aumento de la prosperidad", acuñando un término que hoy quiero rescatar: el de empresario emprendedor.
Son reconocidos en el mundo, la laboriosidad e ingenio de los peruanos. Hemos sabido sobrevivir de diversas crisis. Hoy nos toca contribuir con la bonanza. Vamos a ser empresarios emprendedores. Pero eso no será posible sin la participación decisiva del Estado.
Para ello, nada es más oportuno que éste asuma de veras el rol promotor que le asigna la Constitución. Rol que debe empezar por la Educación, pues sin ella no hay Desarrollo. Pero también capacitar a los pequeños y micro empresarios.
Todos los agentes
La ciencia administrativa no debe ser conocimiento privativo de unos cuantos, sino de todos los agentes productivos que están comprendidos en la micro economía. Capacitación que debe tener dos objetivos: mayor productividad y mejor administración de negocios. Invertir más en investigación y desarrollo para poder competir.
Asimismo, búsqueda de mercados, en el Perú y en el extranjero. Saludamos la decisión del Gobierno en el sentido que nuestros representantes comerciales en el exterior, deben ser designados ahora, por razones económicas y no diplomáticas. Lo ideal es que nuestras Embajadas se conviertan en puntos de venta en el mundo.
Reforma del Estado
Para que todo esto suceda, el Estado debe dejar de ser el primer obstáculo para el desarrollo. Y dejará de serlo si, de una vez por todas, el Congreso de la República desencarpeta la impostergable reforma del Estado. Esfuerzo que por diversas razones, ha venido siendo postergando. Y mientras esta reforma no se haga, el crecimiento económico no podrá convertirse en desarrollo. Y esta será una nueva oportunidad perdida.
Con la mística que nos inspiran nuestros antepasados, juguemos en primera, porque el momento es de primera. Siendo que la unión hace la fuerza, que sea la CONACO la que canalice todos vuestros esfuerzos, y que esta Institución vuelva a ser el referente gremial de todos quienes producen y comercializan bienes y servicios, y, con este esfuerzo, generan empleo. Única fórmula para disminuir en forma consistente a la pobreza. Lo demás es asistencialismo y enajenación. CONACO debe liderar la creación del Bancomype y, que, a través de una ley promovida por el Congreso, sea el gremio que certifique a los empresarios emprendedores para las compras estatales y las exportaciones.